La rinoplastia es la cirugía que modifica la forma de la nariz, y es uno de los procedimientos quirúrgicos más frecuentemente realizados en cirugía plástica. La rinoplastia puede disminuir o aumentar el tamaño de la nariz, cambiar la forma de la punta o del dorso, estrechar los orificios nasales o cambiar el ángulo entre la nariz y el labio superior. También corrige los problemas congénitos, los traumatismos y algunos problemas respiratorios.
Es importante que usted sea franco/ca con su médico. Dígale si ha tenido cirugías previas en la nariz, si ha sufrido traumatismos o fracturas nasales, aunque hallan sido hace muchos años. También es importante que mencione si tiene dificultades para la respiración, si sufre de algún tipo de alergias, si fuma o toma vitaminas o medicamentos
La rinoplastia puede realizarse bajo anestesia local más sedación, o lo que es más frecuente, con anestesia general, dependiendo de la complejidad de la cirugía y de las preferencias de su cirujano. Si se realiza con anestesia local más sedación, el paciente se siente relajado y la nariz y sus alrededores están insensibles al dolor; con anestesia general el paciente está dormido durante la operación.
Una rinoplastia suele durar entre 1 y 2 horas, aunque en casos complejos puede llevar más tiempo. Durante la cirugía, la piel de la nariz se separa de su soporte, compuesto por hueso y cartílago, que es esculpido con la forma deseada. Finalmente la piel es redistribuida sobre este nuevo soporte.
Cuando se completa la cirugía, se coloca una escayola de yeso u otro material, que ayudará a mantener la nueva forma de la nariz. También se colocan tapones nasales en ambos orificios para evitar el sangrado y estabilizar el tabique nasal.
Durante las primeras 24 horas sentirá la cara inflamada, dolor a nivel de la nariz y un desagradable dolor de cabeza, esto disminuirá con los analgésicos que le recetará el médico.
Notará que la inflamación y el ardor alrededor de sus ojos se incrementarán desde un principio, alcanzando un máximo al tercer día. Aplique compresas frías para reducir la inflamación, estos síntomas deberán desaparecer en una o dos semanas.
El sangramiento nasal leve puede ocurrir normalmente en los primeros 2 días después de la intervención. El taponamiento nasal será retirado a los tres días y esto le hará sentirse más confortable. Al final de la primera o segunda semana, todos los vendajes, férulas y puntos serán retirados.
Usted podrá reintegrarse a sus labores en una semana. Sin embargo, pasarán algunas semanas para que usted se sienta en plenitud de sus facultades. Durante dos a tres semanas, evite actividades extremas (nadar, trotar, flexiones, levantamiento de piernas, pesas, relaciones sexuales o cualquier actividad que aumente la presión arterial). Evitará la luz solar, restregarse y sonarse la nariz.
Si usa lentes de contacto, comience a utilizarlos tan pronto como se sienta a gusto. Los lentes de montura son otra cosa. Al retirarse el yeso, el dorso de la nariz deberá permanecer con adhesivos durante seis a siete semanas más, hasta que se completa la recuperación.
El Dr. Hermes Avila Pelayo evaluará la evolución progresivamente. Si usted tiene alguna duda en que puede o no puede hacer, no dude en preguntarle.
El resultado de una rinoplastia es un paciente satisfecho y agradecido, que se adapta rápidamente a su nueva imagen y que, a su vez, aumenta su nivel de seguridad y autoestima. Por otro lado, el paciente puede reemprender las actividades habituales al cabo de tan solo una semana, cuando el cirujano retire la férula. Para cuando esto ocurra, la hinchazón y los hematomas visibles ya habrán desaparecido y el aspecto de la nariz será bueno.
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